Es bastante fácil atraer a los pájaros con comida, especialmente en invierno, y así conseguir fotos espectaculares. Si además tenemos grandes dosis de paciencia es posible ganarse su confianza y vivir momentos inolvidables. Esta mañana he conocido en Plaiaundi a Roman Díaz, que se ha hecho muy buen amigo de petirrojos y carboneros:
Hace 1 año
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